miércoles, 31 de marzo de 2010

El trabajo y el pecado original..




En general suele haber bastantes malos entendidos en torno a la cuestión del pecado original.

Parece bastante claro que la caída del hombre y su posterior condena al trabajo parecen estar íntimamente relacionadas en los textos bíblicos.

Sin embargo, desde el punto de vista cristiano, podemos hallar tres sentidos diferentes del trabajo en relación al pecado.

1) El trabajo en el Paraíso. En el Jardín del Edén, el hombre (Adam y Eva) "trabajaban". En un contexto existencial en el que no existía la muerte ni el dolor, sólo podemos imaginar esta clase de trabajo como algo esencialmente lúdico.

2) El trabajo después de la "caída". El pecado como apartamiento de Dios; condena a la humanidad a un trabajo donde generalmente prevalece el sufrimiento, la alienación y también el dolor.

3)El trabajo creativo: tras la llegada de Cristo y la redención del hombre del pecado original, el trabajo puede volver a recuperar, en gran parte, su aspecto originario. Algunos autores medievales, como Joaquín de Fiore, dividen en tres etapas la historia del cristianismo:

a) La etapa del Padre

b) la etapa del Hijo

c) la etapa del Espíritu Santo

La última etapa, la de la parrousía, conlleva a la humanidad hacia una época de mayor hermandad y armonía. El trabajo pierde de este modo su forma alienante y lentamente comienza a transformarse en algo más personal y creativo.

Les envío un gran cariño a todos y espero que vuestro trabajo sea proclive con esta última etapa.

Felices Pascuas!

10 comentarios:

  1. Re interesante el post!
    Gracias y Felices Pascuas!

    ResponderEliminar
  2. Un gran desafío para cada día, Deli, unir trabajo con sentido y por lo tanto con placer. Si recordamos que en alguna medida el trabajo es casi siempre una elección (es fácil olvidarlo, pero si lo pensamos veremos que es así) el primer paso estará dado! Un abrazo grande. JM

    ResponderEliminar
  3. Esta bueno, una conclusión similar con respecto a lo que nombras como etapa del padre, da Unamuno, el dice:

    Vivían el perfecta salud e inocencia, pero tenían prohibido probar el fruto del Arbol de la CIENCIA del bien y el mal.

    Al no respetar esa prohibición quedaron sujetos a enfermedades, muerte, TRABAJO y PROGRESO.

    El Progreso arranca del pecado original.

    Que mensaje!
    Comer del árbol de la CIENCIA es pecado pues trae PROGRESO.

    ResponderEliminar
  4. Si hay algo que un filosofo no debiera hacer es aburrir, pero vos lo logras con creces, tanto aca como en tus pelotudos comentarios en otros blogs.
    Felicitaciones.
    Manuel Albero

    ResponderEliminar
  5. Manuel Albero: sería interesante que esgrimas algún tipo de argumentación mínimamente coherente, si es que sabés hacerlo...

    Ah, no. Puedo ser muchas cosas, pero dudo que aburrido. ¿Por qué no armás un blog vos y no proponés cosas que sean interesantes?

    Digo, ya que sabés tanto.

    Igual, gracias por tu comentario. Sos el primero en haberme insultado en este blog. Meritorio lo tuyo...

    ResponderEliminar
  6. Ay este muchacho Manuel Albero...
    ¿Quién le habrá dicho que la función de un filósofo es "entretener" o "divertir" a las personas?
    Un filósofo no es un bufón. Es una persona que se pregunta (y no siempre se responde, a decir verdad) acerca de cuestiones de la vida y la vida muchas veces es hilaridad, pero otras tantas es profundidad, es espiritualidad, es empatía, es angustia frente al dolor y la finitud -con y sin Dios- propios y ajenos, es pensar el propio camino... y darle sentido y dignidad de ser transitado.
    Por eso, el filósofo no está obligado a ser "jocoso", ya que sinó correría el riesgo de parecer un chanta o un irrespetuoso del vivir de otros.
    Un chanta es el que habla sin fundamento y un irrespetuoso es quien agrega calificativos a lo que es meramente su perspectiva de las cosas.
    Y los que buscan en cualquier parte que alguien los entretenga, deberían preguntarse acerca de qué cosas de su vida buscan tapar o no reflexionar con tanto entretenimiento, que no conciben que existan espacios para la introspección.
    Es una lástima Manuel, que desmerezcas tu opinión que yo no comparto pero respeto, seguramente como muchos que visitamos este blog, con una grosería innecesaria.
    Rescato, no obstante que te hacés cargo de tus dichos, cosa poco frecuente por éstas horas.
    Te invito por ello a dos cosas: leer el Tao y seguir este blog. De esta forma vas a adquirir más fundamentos para aportarle al dueño del blog en vez de sólo criticarlo, pero, antes que nada vas a ponerle más poesía a tus modales!!!
    Saludo cordial,
    Marcela Demaría

    ResponderEliminar
  7. Soy Manuel Albero, desde el momento que creas un blog abierto a todo el mundo y comentas en otros, sos susceptible a que te critiquen. Bancatela. "ya que sabes tanto", anos hacia que no escuchaba esa frase. Como filosofo trata de desgranar que esconde y te vas a dar cuenta de la boludez que dijiste..y van...
    Sos aburrido, seguramente no para todo el mundo, a mi me aburris.
    A Marcela le diria que entretener no tiene que necesariamente llevar a la risa, algo entretenido tambien lleva a la reflexion, incluso a la tristeza, entretener es captar la atencion, salir de lo obvio. Pero para que me voy a poner a explicar mas a alguien que se espanta ante la palabra boludez.
    Saludos, como veras he colaborado un poco para hacer de este blog pedorro algo menos aburrido.
    Manuel Albero

    ResponderEliminar
  8. Manuel Albero; me parece que estás un poquito resentido. Vaya a saber uno por qué.

    ¿Yo soy aburrido o a vos te falta capacidad de diálogo? ¿No sabés debatir acaso? Porque hasta ahora lo único que hacés es criticarme.

    Saludos
    R.P.

    ResponderEliminar
  9. Manuel A. No te gastes en escribir más comentarios agresivos. Tu impotencia argumentativa es típica de una persona resentida y mediocre. Andá a pelearte a otro lugar.

    Chau looser!

    ResponderEliminar
  10. Gracias por la corrección.
    Estaba mal tipeado, es "Loser"...!

    Besos!
    R.P.

    ResponderEliminar