miércoles, 27 de enero de 2010
Ambigüedades...
Cada vez lo siento más frecuentemente. Este finde nos volvemos a casa. Por un lado, tengo muchas ganas de regresar, de comenzar con mis actividades. Como bien dice Ximena; de conectame con lo propio.
Por otra parte, ya siento que parte de mi ser pertenece a estos pagos, las playas, el mar, la (por ahora) impagable tranquilidad de estos sitios.
Esta ambivalencia la he sentido en otras oportunidades. ¿Será parte esencial de nuestra condición humana? De buscar constantemente el arraigo (en la familia, la profesión, el habitat, la pareja); ¿aún a sabiendas que somos de alguna manera esencialmente "nómades"?
Como fuere, todo a su tiempo. Y agradecido de haber pasado momentos inspiradoramente propicios.
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Bueno, por algo dicen que "viajar es morir un poco". Establecerse en un lugar un tiempo, inventar nuevos hábitos, códigos y rutinas, familiarizarse con determinados paisajes, son cosas que nos cuesta dejar por poquito tiempo que hayamos andado en esa nueva realidad. Hay un arrancar de nuevo de algo hacia otro algo, y la ambivalencia de no ser de aquí ni ser de allá dura algunos días. Creo que cuando te establezcas de nuevo acá esta sensación va a volver a perderse. Para ser reencontrada otra vez, sorpresivamente, en un sitio distinto y en otro tiempo. Cariños.
ResponderEliminarYo tb sentí siempre la misma ambiguedad. Más aún cuando esos lugares solitarios y naturales estaban en el contorno del Brasil, donde además se agregaba un fuerza e inspiración natural deslumbrante. Hoy día pienso que tal vez sea mejor hacer a la inversa, vivir en esos lugares y venir de vacaciones ó a invernar a bs. as. Abrazo.
ResponderEliminarViví en 5 provincias, a todas las ame y siempre sentí esa ambiguedad al dejarlas, pero siempre tambien me entusiasmo lo nuevo.
ResponderEliminarTal vez algunos seamos nómades , no creo que todos.
Mas creo que en el hombre existe un continuo conflicto entre el deseo de la rutina,lo conocido y lo previsible por un lado y las ansias de aventuras, lo nuevo y la incertidumbre por el otro.
Depende a que extremo nos volquemos se dan las diferentes personalidades.
Yo hoy por hoy disfruto al máximo el momento y el lugar en que estoy presente
"Momentos inspiradores propicios"
ResponderEliminarDely, amigo, usted se ha convertido en un artista del pensamiento.
Y encima estoy escuchando Pescado Rabioso.
Puedo poner tu frase de modo permanente en mi blog? Puedo? (Es una pregunta retórica, ya lo hago, jaja!)
Tus sensaciones terminando las vacaciones son completamente "humanas". Creo que se debe a que en realidad, somos naturalmente libres.
Beso grande!!!
Somos naturalmente ambiguos en muchas cosas. Debemos aceptarlo como tal, aunque haciéndonos responsables de nuestros actos que más allá de sus causas psicológicas producen efectos en nosotros, en los demás y en el mundo.
ResponderEliminarEs lindo irse y es lindo volver! Abrazo. JM